El uso de las tecnologías dentro
del aula de clase se ha convertido en un tema de marcada importancia y de
notable seriedad, esto se debe a que como tal, la sociedad actual está
cimentada sobre el avance tecnológico; es pues la tarea de los educadores
proporcionar a los educandos las oportunidades necesarias para aprender la operación
de las herramientas propias de la era en que habitan.
Las Tecnologías de la información
y la comunicación se han convertido en el tema de mayor importancia en
diferentes organizaciones y negocios. No nos ha de sorprender entonces que
estas hagan parte de la educación entonces. Cuando comenzaron a implementarse
las computadoras en las escuelas desde los años 80 se predijo que serían de uso
indispensable en poco tiempo. (Grimus, 2000).
Sin duda las nuevas tecnologías
tienen un gran potencial que puede desarrollarse con el solo propósito de
mejorar y fortalecer la enseñanza y el aprendizaje de cualquier asignatura.
Esto se ve reflejado en el dinamismo que pueden proporcionar a la hora de
convertir las largas explicaciones llenas de palabras en modelos interactivos y
experimentales. Esto último permite que el usuario se vea beneficiado con el
beneficio de un entorno en donde pueda libremente probar sus propias
conjeturas.
En nuestra capacitación constante
y desarrollo de las competencias digitales que nos competen como docentes
entusiastas de la tecnología, nos hemos enfrentado a problemáticas sobre el
aprendizaje de conceptos matemáticos; de primera mano hemos comprobado las
dificultades que enfrentan los alumnos a la hora de abordar el tema de las
fracciones. Es por esto que con asumiendo toda la seriedad que requiere la
labor docente hemos fijado como objetivo primario sobrellevar esta dificultad.
Con la reflexión propia sobre el
ejercicio docente hasta ahora realizado, hemos encontrado que la enseñanza del
concepto ha sido realizada con cierta conciencia en la necesidad de presentar
el conocimiento de formas más claras. En el transcurso de esta reflexión encontramos
que la enseñanza por medio de modelos ha sido la más adecuada debido a la
flexibilidad frente a los distintos tipos de aprendizaje de los estudiantes.
No obstante, esta noble labor que
se estaba realizando de forma correcta se ve oscurecida por la forma
desinteresada en que muchos docentes presentan el concepto. Si bien
reconociendo las bondades de los modelos para la enseñanza no dejamos de
identificar las debilidades que los mismos presentan. La introducción tardía de
esta herramienta dando por sentado la facilidad de la misma y el aprendizaje de
los alumnos ha sido el peor enemigo para el concepto de fracciones.
En esta reflexión queremos pues
presentar los resultados que han dejado este análisis y la forma en que
experimentamos con los modelos dinámicos a fin de crear entornos en donde el
estudiante realice su propio aprendizaje. Este último se entiende que no se deja
a la deriva sino que se hace mediante la guía del tutor experimentado, asunto
que no se traduce sino en familiarización con la herramienta y tiempo de uso en
la misma.
En la realización de este pequeño
modelo que pretendía colaborar con una herramienta para la enseñanza del
concepto de fracciones, encontramos que nuestro entorno de aprendizaje personal
nos proporcionó ciertas herramientas que, en su debido momento fueron de utilidad
o de ningún apoyo. En este caso los canales de youtube fueron herramienta vital
pues el conocimiento allí compartido y su facilidad de acceso son invaluables. No
obstante, los blogs y redes sociales dejaron mucho que desear en cuanto a
proporcionar conocimiento necesario para el uso adecuado de la herramienta
Geogebra.
Esperamos que esta reflexión sea
de utilidad para el lector que haya invertido su valioso tiempo en la consideración
de la misma.
Referencias
Una llave maestra Las TIC en el aula - ..::Ministerio de
Educación Nacional de Colombia::.. (s. f.). Recuperado 21 de mayo de 2016,
a partir de http://www.mineducacion.gov.co/1621/article-87408.html